Dejar las anclas o simplemente levarlas.
Volverme Jack Sparrow y gritar "bring me that horizon".
Guardar el cerebro en la bodega del barco,
coger fuerte el timón y dejar que el viento y el corazón me guíen.
Las olas me mecen, el horizonte se pinta de arcoiris.
Un grito de libertad resuena una y mil veces,
quiero avanzar! quiero volar! quiero ir a donde nadie me va a llevar.
Sólo este navío roto y maltrecho, solos, él y yo.
Tratar de cambiar. O por lo menos querer hacerlo.